Los expertos coincidieron en que los alimentos funcionales pueden ser un aporte valioso para la salud, siempre que su consumo esté acompañado de una dieta equilibrada, actividad física y orientación profesional.
Viña del Mar – Frente a la proliferación de productos que prometen beneficios para la salud y a la necesidad de distinguir entre mitos y evidencias científicas, la Asociación de Empresas Región de Valparaíso – ASIVA, a través de su Comisión de Alimentos, llevó a cabo el seminario “Mitos y verdades de los alimentos funcionales”. El encuentro reunió a especialistas, académicos y representantes del sector alimentos para reflexionar sobre los desafíos y responsabilidades que enfrenta hoy la industria alimentaria.
La actividad, realizada en el auditorio de la Universidad de Las Américas, buscó entregar herramientas y conocimiento técnico a los asistentes, derribando falsas creencias en torno a la alimentación saludable y al uso de suplementos, además de abordar la importancia de la regulación, la evidencia científica y la educación del consumidor.
“Este seminario se enmarca en el trabajo permanente que realiza la Comisión de Alimentos de ASIVA, orientado a fortalecer el conocimiento, la innovación y las buenas prácticas dentro de la industria alimentaria”, señaló Carmen Gloria Urbina, presidenta de la Comisión. “Hoy más que nunca es fundamental generar espacios de encuentro que convoquen a todos los actores del ecosistema, tanto la academia, las empresas, los profesionales de la salud y las instituciones públicas, para abordar de manera responsable temas que inciden directamente en la calidad de vida de las personas”, manifestó.
Expertos llaman a informarse y poner la salud en primer lugar
La actividad contó con la presentación de 3 expertos. El Dr. Marcos Lorca, coordinador académico de la carrera de Química y Farmacia de la Universidad Viña del Mar, abrió la jornada con su exposición “Nutrición, suplementación y farmacología: la delgada línea entre salud y dopaje”, donde destacó la relevancia de priorizar la salud y la información responsable.
En su intervención, recalcó que “se tienen que tener claro lo importante que es la salud primero. Informarse, alimentarse bien, hacer ejercicio, después proceder a la suplementación cuando sea requerido. Y finalmente, considerar la medicación, pues no hay que abusar. Lo más importante, como decía Paracelsus y el Gran Sabio, la diferencia entre algo tóxico y algo saludable, es la dosis.”
Por su parte, la Dra. Macarena Landaeta, directora de Salud Comunal de Isla de Maipo, abordó en su charla “Suplementación en Chile: el futuro del bienestar” los riesgos de la automedicación y el valor de la orientación profesional. Al respecto indicó que “la suplementación es fundamental dentro de mantener una vida saludable y una longevidad, pero tal como dice su palabra, como un coayudante de la dieta, no como algo único, ya no se trata de reemplazar alimentos por suplementos. Una vez que elijamos los suplementos, se debe tener conciencia sobre de dónde vienen, cuáles son las contraindicaciones y que sean indicados por un profesional médico”, enfatizó.
Agregó, además, una advertencia clave frente al consumo irresponsable: “No comprar cualquier suplemento y no tampoco dejarse guiar por lo que te dicen en redes sociales, porque los suplementos no son magia. Los suplementos van dentro del marco de una alimentación saludable, del ejercicio físico. O sea, para mí es fundamental que se mantenga esta imagen de coayudante, no de reemplazo.”
Finalmente, el empresario John Alarcón, socio fundador de Prodalysa y Grupo Nutriba, presentó la experiencia de su empresa en la creación de alimentos funcionales basados en stevia, destacando la importancia de la transparencia y la calidad.
En ese sentido, advirtió que “cuando se desarrolla un alimento funcional, lo primero que se debe hacer es ver que ese efecto sea cierto, que esté validado científicamente y que haya una regulación correcta. Y por otro lado también creo que es importante considerar los otros ingredientes que contienen, porque obviamente un producto funcional no es solo ese ingrediente activo, sino otras cosas que contenga”.
En esa línea, subrayó el rol del consumidor informado: “Es importante un etiquetado que el consumidor pueda entender también para saber qué es lo que está consumiendo.”
El evento contó con el auspicio de IST, Cecinas Venezia, Pontificia Universidad Católica de Valparaíso, Confites Merello, Universidad Técnica Federico Santa María, Industrias Neuchatel y ASIVA Capacitación.


